¿Sabes cómo limpiar los azulejos que tienes en el baño? ¿Quieres mantenerlos como nuevos? No te preocupes porque te vamos a dar unos consejos bastante fáciles y sobre todo económicos para que la limpieza de tus azulejos no suponga ningún problema.
Antes de todo, protege tus manos con guantes de goma, y después de cada limpieza asegúrate de ventilar el baño, con esto evitaremos problemas en la piel y/o mareos.
Azulejos del baño y su limpieza
Desengrasar
Este es el primero de los pasos, para una correcta limpieza. En el baño solemos utilizar de forma continuada productos que generan una fina capa de grasa, que además apenas vemos, pero que esta presente en el azulejo.
Necesitamos, cerca de medio litro de agua, dos cucharas de amoniaco y una esponja con la que aplicaremos la mezcla sobre la superficie a desengrasar. No te preocupes por enjuagar después de desengrasar, ya que esta mezcla no daña los azulejos. Lo único que necesitas es secarlo, preferiblemente, con un trapo limpio.
Descalcificar
Para descalcificar, necesitaremos medio litro de agua, un vaso de agua y una esponja. Este proceso es tan simple como, aplicar la mezcla por toda el área, dejarla actuar por 5 minutos y aclara los azulejos del baño con un trapo húmedo, y finalmente seca los azulejos con un paño limpio.
Juntas
Limpiar las juntas quizás sea el trabajo más engorroso de todos, sobre todo cuando tenemos las juntas ennegrecidas.
Tenemos que mezclar, agua caliente con jabón graso, después lo aplicaremos con una esponja directamente sobre las juntas. Una vez que estén todos los espacios cubiertos, utilizaremos un cepillo de dientes (no hace falta que sea nuevo, puedes utilizar uno viejo) y frotaremos enérgicamente hasta que eliminemos toda la suciedad.
Brillo
Necesitamos un papel de periódico humedecido en agua, le añadiremos un chorro de amoniaco, y frotaremos por toda la superficie. Aclara bien los azulejos una vez que hayas finalizado. Ya veras que con este truco, tus azulejos volverán a brillar como nuevos.
Tus azulejos para baño recuperaran su aspecto original. ¿conocías estos consejos?
